Camina y... ¡adiós a la grasa!-Y Otros artículos de Cuerpo Ok.

En ocasiones, una vuelta a la manzana te ha bastado para despejar la mente y sentirte mucho mejor. Tres días a la semana de ligera marcha callejera mejoran tu figura y la salud de tu corazón. Lo sabías: andar es bueno. Pero hay más: caminar puede ser el mejor aliado de tu dieta para eliminar esa grasita que se te acumula aquí y allá… incluidas las venas.

Divide y vencerás
¿Poco tiempo? No hay excusa, sobre todo si piensas en lo que asegura la Comisión Norteamericana de Certificación de la Atención Médica: que caminar disminuye el riesgo de sufrir un ataque cardíaco, hipertensión, osteoporosis e, incluso, depresión.Y es que se ha comprobado que da lo mismo que pasees durante 15 minutos dos veces al día, que media hora de golpe. Sólo un requisito: hazlo a paso ligero, pero sin perder el aliento. Y ¡son suficientes cuatro días a la semana para aumentar las cifras de colesterol bueno!

Si andas, bebe
Pero hazlo antes, no durante. Lo mejor es que te tomes un vaso de agua en la media hora previa a la marcha, y otro vaso justo cinco minutos antes de ponerte a caminar. Estarás perfectamente hidratada para, como confirma José Calabuig, director del departamento de Cardiología Clínica de la Universidad de Navarra, “aumentar la flexibilidad de las piernas, la fuerza muscular, la resistencia a la fatiga y el retorno venoso, sencillamente caminando”.

Mejor poco que nada
Si tienes pereza, no te dejes llevar por ella: te sentirás culpable y, además, dejarás de hacer ejercicio. Mejor, dedica menos tiempo o anda más despacio. Sal, camina y, a lo mejor, una vez en la calle, ya te animas del todo y cumples esos 30 minutos de buena marcha que te ayudarán a dormir mejor.

Conviértelo en rutina
Siempre paséate a la misma hora. “Si tu digestión es lenta, no camines después de comer. De lo contrario, si trabajas fuera de casa, el tiempo antes del almuerzo es un buen momento”, aconseja Marcos Flórez, director de la agencia de entrenamiento personal a domicilio ‘Estar en Forma’.

Colócate
¿La mejor postura? Según Marcos Flórez, la que adopta tu cuerpo cuando subes cuestas: mira al frente, relaja los hombros, estira la espalda, saca el pecho, contrae el abdomen, mete el culete, ¡y respira de forma natural! Un truquito: camina acompañada y mantén una conversación. Si ves que te fatigas al hablar, es que el ritmo de marcha es bueno.

¿Sabías qué?
Andar rápido durante 30 minutos consume las 100 calorías de tu yogur con azúcar.
Cuanto más pesas, más energía consumes. 55 kg te hacen quemar 370 calorías en un paseo de dos horas.
A un ritmo normal de marcha recorres 1 km cada 12 minutos, es decir, 5 km a la hora.

Tema: ¡Muévete!-Aerobox Miér Ago 06, 2008 7:27 am

De los tres deportes seleccionados, el aerobox es el único que trabaja el cuerpo por completo, desde la cabeza hasta los dedos de los pies.

Tanto esgrima como squash, ponen a punto el tren superior de modo unilateral, ya que el arma y la raqueta se sujeta con un brazo, que es el que se fortalece más (el tren inferior sí se entrena enteramente). Con el aerobox eso no ocurre. Es una mezcla de aeróbic y boxeo, con la gran diferencia de que no se lucha contra nadie, se lanzan patadas y puñetazos al aire y, a veces, contra sacos de entrenamiento. Itziar Díaz, monitora de esta disciplina, nos da más datos sobre este deporte de origen estadounidense: “Una sesión de aerobox trabaja todo el cuerpo a partir de golpes y patadas propias del kickboxing. Son repeticiones rápidas, coordinadas mediante una coreografía y al ritmo de la música, que implican una gran descarga de energía”. En una clase de aerobox se pueden perder más de 500 calorías. “Son más de las que se gastan con aeróbic, ya que se intensifica el ritmo y se añade la descarga de energía con golpes y patadas”, explica Itziar.
La clase se inicia con un calentamiento de cinco a diez minutos. Luego vienen los 30 o 35 minutos de coreografía con los movimientos de piernas y brazos. La sesión termina con 15 minutos de estiramientos. Los beneficios son muchos y variados. Para Itziar: “Es uno de los entrenamientos más completos. Mejora el tono muscular y el tiempo de reacción física a los estímulos. Aumenta la elasticidad y fortalece muslos, glúteos, abdomen y brazos. También es interesante como acercamiento a la defensa personal... Hay otra cuestión que es la emocional: tengo muchas alumnas (y alumnos) que se apuntaron en épocas de estrés laboral y consiguieron liberar tensiones gracias al aerobox”.

Tema: ¡Muévete!-Squash’ Miér Ago 06, 2008 7:30 am

Le llaman el deporte quema grasa. Tanto es así que no resulta recomendable practicarlo durante más de 45 minutos por la cantidad de calorías que se consumen y el agua que se pierde.
Aunque nació en 1850 en un colegio inglés, no fue hasta los años 60 del siglo XX cuando se convirtió en un auténtico fenómeno en Australia: lo pusieron de moda los presos de las cárceles de allí, que lo usaban para liberar tensiones. Y es que el squash es una actividad que, además de quemar grasa, fulmina la ansiedad. En Nueva York, las grandes multinacionales comenzaron a instalar pistas de squash en sus edificios para que los empleados pudieran ‘desfogarse’ en poco tiempo y de manera eficaz. Es un deporte considerado “muy intenso” y durante su práctica se consumen más de 12 calorías por minuto. En 45 minutos se pueden llegar a consumir más de 550. Olga Fernández, licenciada en Ciencias del deporte y entrenadora de la Comunidad de Madrid, nos pone ejemplos muy claros: “Desde el punto de vista energético, tres cuartos de hora de squash equivalen a dos horas de tenis o incluso a ocho kilómetros de marcha”. Y no sólo eso, “permite una mejora de la capacidad cardiovascular, y de la flexibilidad, coordinación y agilidad. Tonifica los glúteos, caderas y piernas”.
Practicar squash no es caro, para empezar la raqueta es mucho más barata que la de tenis o pádel (las hay desde 20 euros) y la ropa ha de ser, sencillamente, cómoda. “Es importante –explica Olga– llevar una camiseta de repuesto para cambiarse durante el partido, ya que se suda tanto que se empapa enseguida y no es recomendable jugar con ella cuando está mojada –así evitarás un constipado seguro–. También hay que beber agua cada 15 minutos para ir reponiendo la que perdemos”. Se juega en pista cerrada, por lo que el mal tiempo no es excusa, y las reglas son sencillas. Lo mejor es hacerlo en pareja. Si has practicado algún deporte de raqueta, aprenderás pronto, y si no, te costará un poco más, pero al final te harás con él. “Como los puntos se juegan muy rápido y los sets suelen durar poco, es muy divertido ir a jugar en grupo y alternar partidos y descansos. Así contarás con un tiempo de recuperación para rehidratarte y descansar”, comenta Olga.

Tema: ¡Muévete!-Esgrima Miér Ago 06, 2008 7:32 am

Piensa en un deporte elegante y diferente; individual, pero para hacerlo en pareja (o en equipo); y que endurece piernas, glúteos y quema calorías, pero en el que no hay que correr (demasiado). ¡Bingo! La esgrima.

Probablemente has oído hablar de esta disciplina, la has visto practicar en películas, retransmisiones deportivas..., pero nunca has sabido cómo aprenderla o nunca te ha picado el gusanillo. Pues es bien sencillo, sólo necesitas ganas, un teléfono y un club al que dirigirte. Marcos Flórez (seis veces campeón de España y ex miembro del equipo nacional de sable) nos pone al día sobre este deporte que engancha por varios motivos y porque no se parece a ningún otro: “Tienes un arma, que puede ser sable, florete o espada, y aprendes a atacar y contraatacar, algo que nosotros llamamos morir matando”; además, es como volver a la infancia, “vas persiguiendo a tu rival para intentar ‘pincharle’; relaja: “En serio, es un deporte tan intenso y que requiere tanta atención, que te hace olvidar todo lo demás: trabajo, problemas... Hay muchísima gente que viene a practicar después de un largo día de trabajo, precisamente para evadirse. Y es que lo importante de unas vacaciones, por ejemplo, no es descansar físicamente y estar tumbado a la bartola, sino lograr desconectar”; y la última razón por la que crea adicción es... que ¡cansa!, “y eso también alivia tensiones”. Practicando esgrima pierdes unas 450 calorías a la hora, lo que no está nada mal.
La posición de inicio, y la que se mantiene casi durante todo el asalto, es la mejor para fortalecer glúteos y muslos. “Es brutal, brutalmente buena. Es como estar sentada en el aire, imagínate. Las rodillas se doblan ligeramente, las piernas están abiertas y continuamente en tensión, con lo que se endurecen una barbaridad. La espalda se mantiene erguida, y es bueno para corregir posturas”. Y no sólo esto, además, según vas practicando, ganas en flexibilidad, elasticidad y reflejos. “Tú tienes que mantener tu cuerpo lo más alejado del rival, pero a la vez has de intentar alcanzarlo con tu arma, con lo cual aprendes a estirar brazos y piernas para llegar lo más lejos posible sin que el tronco se mueva”.
En cuanto a las armas, la más sencilla es la espada, y sus reglas de uso son fáciles. Puedes atacar al rival en todo el cuerpo y, cuando le alcanzas, se enciende una luz que se ‘chiva’, eso significa que has “tocado” o te han “tocado”. Con este arma, los jugadores están dando pequeños saltos hasta que uno hace un desplazamiento rápido hacia adelante para atacar. El florete es más difícil, el blanco es el tronco, pecho y espalda, y tiene reglas más complicadas. En un combate con florete, los contrincantes parecen dos bailarines, uno se desplaza hacia adelante y el otro, hacia atrás. Por último, el sable, es un arma de caballería y puedes tocar al contrario con la punta o con el palo; aquí hay auténticas persecuciones por la pista, pero nunca se pueden cruzar las piernas (para que no se convierta en una carrera). Si quieres probar, el arma te la dejan en el club.

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