Las maneras negativas de pensar provocan que las personas quieran darse por vencidas, sintiendo en su interior un profundo estado de frustración.
Es importante tener en claro que, justamente, el ver las cosas de forma negativa es uno de los ingredientes centrales de las patologías depresivas.
Generalmente, estos estados de depresión no se basan en circunstancias reales concretas, sino en consideraciones negativas del individuo sobre su persona y en relación con los demás, que lo llevan a sentirse siempre disminuido en sus condiciones y potencialidades.
Sin embargo, el desarrollo de algunas pautas de autoayuda puede lograr que los pensamientos negativos, con el tiempo, comiencen a desaparecer. Esto, por supuesto, no invalida el resto de tratamientos psicológicos o psiquiátricos que la persona emprenda.
Una pequeña guía de autoayuda contra la depresión incluiría estos puntos:
• En su actividad diaria, fíjese metas realistas, tomando en cuenta la depresión, y no trate de asumir una cantidad excesiva de responsabilidades que lo sobrepasen.
• Divida sus metas en pequeñas aspiraciones, establezca prioridades y haga lo que pueda en el instante que pueda.
• Siempre es preferible estar acompañado y confiar en alguna persona, para compartir charlas y no sentirse solo.
• Desarrolle cualquier tipo de actividades que le ayuden a sentirse mejor: haga ejercicio liviano, concurra al cine o a un juego deportivo, participe en actividades recreativas y sociales. Todo eso puede ayudarle a salir del pozo.
• No espere que su estado de ánimo mejore de un momento a otro, sino gradualmente. Superar la depresión toma un buen tiempo, pero con voluntad y trabajo es posible sentirse un poco mejor cada día.
• Hasta que el estado depresivo mejore, es aconsejable que posponga las decisiones más importantes, como cambiar de trabajo, casarse o divorciarse. En todo caso, consulte a personas que lo conozcan bien y tengan una visión objetiva.
• Siempre deje que sus familiares y amigos le ayuden. No se resista a eso.
• Por último, recuerde que los patrones positivos de pensamiento deben ir reemplazando poco a poco a los pensamientos negativos, que son parte de la depresión.