lo valemos o no lo valemos?
La gente que prepara estadísticas de lo que vale una esposa calcula sus labores de niñera a 50 centavos la hora, sus servicios de secretaria a un dólar veinticinco, la lavanderia a 10 dólares semanales, etcétera. Sumando todo, no pasa de los 150 dólares por semana.
Me parece que nuestra media naranja sale así sumamente rebajada. Una buena esposa sirve de abogado. Se va a ver al amigo que le vendió a usted el auto nuevo y le dice:
- Escucha, Pepe, con nosotros tú te deshiciste de un cachivache con ruedas que al arrancar emite los ruidos más extraños, si es que arranca, lo que no ocurre muy a menudo... por tanto, o te entablo juicio o me pongo a gritar como loca en este salón de ventas tan lujoso que tienes, te armo un escándalo, me tiro de los cabellos y pateo el suelo.
- Señora, repararemos el auto- dice Pepe.
Esto es mucho más de lo que podria lograr un marido. Él entraria diciendo:
- Eh, Pepe, mira, ¿no te pareceria que quizá algo no marche del todo bien en el modelo aerodinámico que me vendiste?.
- No- dice Pepe.
- Lo mismo pensaba yo- dice el marido.
Y la familia se queda con el 'clavo' remachado.
Por convenios de esta especie, yo le sumo a la esposa los 25000 dólares en honorarios anuales que costaria un abogado. En calidad de tal, ella se encarga de que la lavanderia nos de camisas nuevas cuando nos arruina las viejas y convence a la compañia de seguros que debe colocarnos un techo nuevo en la casa.
Las esposas son también médicos. Un marido llega a casa sin ningún síntoma preciso, pero sintiéndose fatigado y ella le da una receta instantánea:
- Lo que tú necesitas es un buen partido de canasta con Esteban y Maria Inés. Será el tónico perfecto para tu organismo. Los vamos a visitar y en el camino cenaremos en un restaurante baratito.
De este modo, él sobrevive. ¿Cuánto gana un médico al año?. Apunte usted 15000 dólares más.
Aparte de curandera, la esposa también es siquiatra. El marido dice:
- Quiero ir a jugar a los bolos mañana por la noche.
La esposa diagnostica:
- Estás loco.
Si contamos una sesión a la semana, ya son 50 dólares, o sea, 2500 dólares al año.
Luego considere los consejeros matrimoniales. Nadie aconseja mejor que la esposa. El marido dice:
- Algo anda mal en nuestro matrimonio.
Ella contesta:
- La culpa es tuya.
¿Qué más se puede decir? Anote otros 25000 al año.
Las esposas se convierten además en otros profesionales de alto salario, como por ejemplo asesores de impuestos e ingenieros. Sumando todo, mi cálculo es que la esposa promedio vale, facilmente, 185000 dólares al año.
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