Fatiga persistente martes 1 de junio de 2010Sentirse cansado es normal en ciertas situaciones, pero a veces la vida moderna puede ensañarse con nuestro nivel de energía.
La fatiga no es lo mismo que estar somnoliento, aunque muchas veces uno de sus síntomas es tener ganas de dormir y una falta de motivación por hacer cualquier cosa.
Contadas veces al año, sentimos que contamos con un nivel bajísimo de energía y a la hora del almuerzo ya no damos más. ¿Cuál es la causa de este cansancio? El estrés, una alimentación inadecuada, la sobrecarga de trabajo e incluso algunos tratamientos médicos pueden causarle fatiga.
La fatiga no es lo mismo que estar somnoliento, aunque muchas veces uno de sus síntomas es tener ganas de dormir y una falta de motivación por hacer cualquier cosa.
En algunos casos, la fatiga es un síntoma de un problema de salud que debe ser tratado por un médico. La mayoría de las veces, en todo caso, este problema puede ser causado por los hábitos o la rutina de la persona.
De hecho, es probable que el individuo sepa cuál es la causa de la fatiga, y con un par de cambios en el estilo de vida podrá disfrutar nuevamente de la vitalidad.
Causas
El primer paso para saber cuál es la causa de su fatiga es revisar cuáles pueden ser los elementos que desencadenan el cansancio. En este sentido, existen tres áreas generales que los expertos señalan como causas probables.
Estilo de vida: La fatiga a veces tiene una causa obvia, como no dormir lo suficiente, sobrecarga de trabajo o hábitos poco saludables.
Psiquis: La fatiga es un síntoma común de problemas mentales, como depresión y tristeza, y puede venir acompañado por otras señales como irritabilidad y falta de motivación.
Salud: Sentirse exhausto puede ser un síntoma de una condición médica, como problemas a la tiroides, enfermedad cardiaca o diabetes.
Algunas causas comunes de fatiga son falla renal aguda, abuso de alcohol, anemia, ansiedad, consumo de cafeína, cáncer, síndrome de fatiga crónica, depresión, enfisema, actividad física excesiva, pena, hipertiroidismo, hipotiroidismo, falla renal, falta de sueño, medicamentos como antihistamínicos, remedios para la tos o el resfrío, analgésicos, antidepresivos y remedios para el corazón; obesidad, embarazo, recuperación tras una cirugía mayor, síndrome de piernas inquietas, apnea del sueño, estrés, diabetes (ambos tipos), y hábitos poco saludables de alimentación.
Busque ayuda médica inmediata si su fatiga viene acompañada de sangramiento anormal, si pierde peso sin explicación, si sufre de dolores abdominales, pélvicos o de la espalda o si sufre dolores de cabeza severos.
Llame al médico si ha tenido fatiga por más de dos semanas a pesar de tratar de descansar más, si ha reducido el nivel de estrés, come bien y bebe suficiente agua.
Cuidado personal
Una vez que haya enfrentado su fatiga y sus causas, encontrará que hacer pequeños cambios en el estilo de vida (o tratar una condición médica subyacente) le ayudará en el largo plazo a retomar su vitalidad y las ganas de hacer cosas.
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