Un experto vincula la fibromialgia y el dolor crónico a la sobrecarga emocional

21.12.2009

Asimismo, las alteraciones glandulares son una alarma disparada
por el 'cerebro emocional' cuando la persona ignora repetidamente sus
emociones --ira, miedo, tristeza o aburrimiento-- y no restaura el
equilibrio entre sus necesidades personales y las demandas externas,
vinculadas al trabajo y a las relaciones.

El fundador de la Terapia Reversa reivindicó la eficacia de este
método para resolver dolencias sin causas patológicas --desde la
fibromialgia hasta el dolor de cabeza pasando por la depresión--, y
la definió como un "proceso educativo" basado en la conversación con
los pacientes.

El objetivo es ayudarles a reconocer y a comprender los mensajes
que su 'cerebro emocional' les comunica a través de los síntomas, y a
actuar en consecuencia para satisfacer sus necesidades emocionales.
Se trata de "aumentar la comprensión de las propias emociones" para
mejorar la calidad de vida, y por lo tanto, la salud, apostilló
Easton.

Sobre la ansiedad, puntualizó que es un estado de la 'mente
racional' que surge cuando se bloquean las emociones, y subrayó que
aumenta los síntomas. Para evitarla, recomendó tomar decisiones
prácticas para solucionar los problemas, en vez de limitarse a
proyectar escenarios de futuro "desastrosos".

El psicólogo, que describe su terapia en 'El Método Reverse
Therapy' (Tarann Edicions, 2009), consideró que las personas más
vulnerables a la sobrecarga emocional son madres solteras;
estudiantes que deben hacer frente a grandes expectativas académicas;
profesionales con un exceso de ambición laboral, y personas mayores
que padecen aislamiento social.

Al fin y al cabo, concluyó Easton, la clave del bienestar continúa
siendo realizar actividades que ayuden a vivir el presente; ser
honestos con las propias emociones; cuidar las relaciones sociales,
familiares y sexuales, y mantener un equilibrio entre horas de
trabajo, descanso y ocio.